El sabor de un ajiaco

Ajiaco Bogotano

A más de 2.500 metros de altitud, en un día frío y lluvioso, el sabor de un ajiaco es lo que más te apetecerá si estás en Bogotá. 

El ajiaco, es uno de los platos más tradicionales y típicos de la capital colombiana. En algunas casas, es tradición reunir a toda la familia el domingo para almorzar, y éste es el plato estrella. 

Pese a ser un guiso cuyos ingredientes principales son muy “básicos”: papa (patata), pollo y mazorca de maíz, tiene un sabor delicioso. Entonces, ¿cuál es el secreto del ajiaco? El principal secreto del ajiaco bogotano o santafereño es la guasca, que es una hierba aromática que le da ese sabor tan característico al plato. 

Además, se usan tres tipos de papas: papa criolla, papa pastusa y papa sabanera; cada una de ellas deja su presencia y sabor en el guiso. El ajiaco se sirve en un cuenco de barro, acompañado generalmente por un trozo de aguacate y una porción de arroz blanco. Algunas personas, le añaden crema de leche y alcaparras encurtidas. Esta mezcla hace que sea una auténtica delicia.

Por si te lo estás preguntando, el ajiaco bogotano y el ajiaco santafereño son el mismo plato. Lo de santafereño  viene porque antes Bogotá se llamaba Santa Fé de Bogotá.

En lo que a mi respecta, durante el tiempo que estuve en Bogotá, tuve la gran suerte de ser invitada un domingo a almorzar en casa de mis amigos, la familia Hernández. Aquí pude probar un auténtico ajiaco bogotano en familia. ¡Fabuloso Doña Ligia!

Reconozco que al principio no recordaba bien el nombre de este plato y puede que a ti te pase lo mismo. Pero créeme, después de probarlo una vez será imposible que te olvides, querrás repetir una y mil veces y tendrás la misma cara de felicidad que yo 😉

¡Buen provecho!